jueves, 26 de marzo de 2015

¿Cómo hacer leche de coco?



La leche de coco es el sustituto perfecto para todas las que buscan no tomar leche de origen animal. Es recomendable para los individuos con gastritis por su tipo y contenido de grasa, también nos ofrece propiedades antibacteriales y sugiere tener propiedades protectoras para enfermedades cardiovasculares ya que eleva los niveles de HDL (colesterol “bueno”).

La leche de coco es un suero natural por su alto contenido de minerales, funciona muy bien para rehidratar y es un buen sustituto de las bebidas deportivas. Además, es muy fácil de hacer en casa.

Te recomiendo que intentes hacerla ya que la leche de coco comercial tiende a tener altas cantidades de azúcar y conservadores.

Ingredientes:

·Coco rallado sin endulzar, de preferencia orgánico ó pulpa de 1 coco natural procesado finamente (se necesita un procesador de comida para moler el coco natural, por su dureza rompería la licuadora)

·Agua

* Recomendamos utilizar 1 taza de agua por 1 taza de coco, pero dependiendo el gusto se puede hacer más concentrada o más diluida.

· Agua de coco (una taza por cada 3 tazas de agua).




Manera de prepararse:

·Hierve el agua. Déjala enfriar un poco, hasta que ya no tenga borbotón.

·Pon el coco dentro de la licuadora y añade el agua. Déjalo reposar durante 10 minutos para que la grasa del coco se diluya en el agua.

·Licúa hasta obtener una pulpa muy fina.

·Filtra con una coladera y una tela de lino, algodón, gasa, o de las mágicas que se utilizan para filtrar hiervas. Lo importante es que pase el líquido pero no la pulpa.

¡Lista para disfrutar!

Una vez lista la leche de coco se puede refrigerar hasta 5 días.



Crema de coco

Si se deja reposar durante más de 36 horas se separará la grasa de la leche, se la podemos retirar para usar como crema de coco agitar antes de usar para que se encuentre homogénea.

Guarda la pulpa del colado para convertirla en harina de coco posteriormente.

Si la quieres usar para algún postre puedes agregarle una vaina de vainilla, una raja de canela, nuez moscada o un poco de menta. Echa a volar tu imaginación y encuentra la combinación que más te guste.

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